Terminó el carnaval. Entró la cuaresma. Ha caído el telón, y las máscaras con él. Lo que no cae ni se va es el mal tiempo. Los que vivimos por el sur no estamos acostumbrados a esto. El ambiente está de lo más irascible y la gente ni os cuento.
Qué ganitas de primavera.
¡¡Qué ganitas!!