martes, 24 de febrero de 2009

Nada es etermo

Y un termo eléctrico, menos. El mío llegó a su fin. Gotea desde ayer. Esto me ha hecho recordar una Noche Buena (no tan buena) en la que al terminar la fiesta me fui a mi pisito de soltero con una persona con el fin de "rematar" la noche. Al abrir la puerta del piso una tromba de agua salió por ella como si de "La aventura del Poseidón" (1972) se tratara. Seguí el caudal y me llevó al cuarto de baño en donde el termo despedía agua como si fuera la fuente de la Palmera. Os podéis imaginar el resto: lo que quedaba de noche la pasamos recogiendo agua y más agua, ya que el termo era de cincuenta litros.

Afortunadamente rematé al día siguiente.

En fin... nada es eterno, y un termo eléctrico, menos.

lunes, 16 de febrero de 2009

En tierras de Santa Claus

De Helsinki vengo. No ha sido el viaje de mi vida, por el entorno. No me he sentido cómodo, la verdad. Sin ánimo de ofender a nadie estoy, quizá, malacostumbrado. Pero bueno: nos quedamos con la experiencia de haber estado lo más al norte que he estado nunca. Paisaje precioso, frío mucho, pero soportable, y el detalle de la aduana: Esta vez, para ahorrar fuerzas y pérdidas, decidí no llevar maleta. Esto es, en el estuche de la zanfoña y todo como si de un tetris se tratara, metí la ropa interior (a la que no sé porqué llaman "muda", con lo que canta) el "neceser", los altavoces de viaje, partituras etc... En uno de los aeropuertos me hacen abrirla y con cara de guasa (toda la que un nórdico pueda llegar a poner) mira los calcetines, camisetas y calzoncillos... a lo que yo respondo: "¡Qué! ¡Tú no sabes las de cosas que hacen falta para tocar este instrumento!". Unas risas, la cierro, y si llego a tener dentro un cuchillo montañero, me lo hubieran dejado pasar. He comido reno (confieso que soy más de secreto ibérico) y salmón; el mejor que he comido nunca. Para la próxima, espero que sea con mi gente.

Por lo pronto, frío, ahí te quedas. Aquí, hoy, hace un sol maravilloso. Estas palabras son extrañas en mí, pero... ¡lo echaba de menos!

martes, 10 de febrero de 2009

¡A quién se le ocure!

Estas cosas me pasan por "tontoelculo". De manera que nos vamos la SeSe a Segovia (al Espinar para más señas) por aquello del cochinillo, el cordero, sus buenos caldos etc... y me da un "golpe de frío". Claro, nosotros los del sur de esto no entendemos ni papa, pero si no llega a ser por mis enfermeros particulares (a quienes he de agradecer desde aquí su trato para conmigo) ahora me vería con un sombrerito de copa, dos piñas por ojos, una bufanda desgarrada y una zanahoria por nariz. Y es que soportar menos diez con un chalequito de entretiempo... manda güevos.

El próximo en el Viso del Alcor. ¿O era en el Vicio del Alcohol?