viernes, 22 de mayo de 2009

Tenor o no tenor

Este es el nombre del programa en el que mi amiga Alicia me ha sumergido de lleno. El proyecto tiene una pinta "pa' comérselo". Mezcla de Cabaret, Copla y Ópera. Junto a ella canta Mayca (nueva amiga) y creo que si todo nos va bien, este año puede ser un ir y venir a sitios, lugares y situaciones de lo más variopintas. Con Alicia es un placer trabajar. Fue miembro de Artefactum hasta que el encanto Italiano la hizo presa... y se nos fue (aunque siempre estuvo está con nosotros). Recuerdo hace unos años, en el hotel, que me hizo una visita y.. ¡la liamos parda! Al día siguiente todo el mundo (clientes y trabajadores) comentaba su actuación. Alicia, ni corta ni perezosa, hizo un show de los suyos en el hotel.

Seguro que nos lo pasamos en grande.

Seguro seguro.

lunes, 18 de mayo de 2009

Envidia, y no sé si sana

Eso es lo que le tengo a mi querido amigo Verbo. Envidia cochina y pura. A él, y al Señor Pérez. Cada vez que vengo de viaje (esta vez Holanda, La Haya, y a fe mía que me pareció preciosa) recibo fotos del suyo. Agggg ¡Hasta tiene un certificado de haber subido la Gran Muralla! ¡Qué asco me dais, joíos!


En la Plaza de Tiannamen, con su certificado, en la Gran Muralla, en la Ciudad Prohibida y en el Transiberiano.

Anda, cuidarse mutuamente, que ahora estáis solitos los dos. Ángel, por si entras por aquí, un beso fuerte, y cuídate tú también.

¡Envidia os tengo! ¡Envidia!

martes, 12 de mayo de 2009

El Señor Pérez continúa su viaje

Regreso de Italia, y me encuentro con nuevas fotos del Señor Pérez. Esta vez en Irkutsk, Ulan Ude y Ulaan Baatar (Mongolia). Os dejo las fotos. ¿Es o no es pa comérselo?


Redoble de tambor y.... ¡Ale hop!

Después de este maravilloso salto en el que veía desde arriba a modo de red los mejores brazos del mundo (los brazos de la amistad verdadera) empieza lo verdaderamente duro. Eso es otra historia. Por ahora, a descansar del esfuerzo, y a pensar en el siguiente. Cuidaremos la estética y perfeccionaremos la caída. Afortunadamente no hemos sufrido lesiones graves.

Gracias Giulia y Ro, públicamente y aquí, por vuestra hospitalidad. He tenido las mejores anfitrionas. La vuelta a Urbino fue de lo más emocionante. Giulia, tienes una casa que es envidiable. Magari podamos hacer un SeSecato allí. La de tus padres, ni lo cuento. ¡Qué barbaridad! Tu cocina, y tus dotes en ella... envidia del propio Arguiñano. Y tu compañía, paciencia y apoyo... sobran las palabras. A Ro, además de agradecerle su hospitalidad, agradecer también el empeño que está poniendo en llevar a Artefactum a su pueblo. Todos sabemos lo difícil que es ejercer de intermediario en estos casos. Ro, te lo estás currando de miedo. Y que se prepare Castignano que como vaya todo a buen puerto ¡que Dios nos coja confesaos!

Gracias y seguimos para bingo.

lunes, 4 de mayo de 2009

El Trovador

Mucho se ha escrito sobre el tema del destino, el azar, el sino, Dios... Lo cierto es que hasta que el ser humano no pueda controlar el futuro, estas incógnitas seguirán perennes en nuestras vidas. Cuántas y cuántas veces hemos oído: "eso es el destino", "ha tenido suerte", "Dios lo ha querido"... Prefiero decir y pensar: "él se lo ha buscado". De alguna manera somos nosotros quienes forjamos nuestro futuro. De alguna manera, nosotros terminamos nuestro pasado. Sea como fuere, pequeñas variables en la ecuación son las que hacen variar su resultado. Algunas predecibles, otras nos cogen de sorpresa. En las primeras... "te lo dije", "yo sabía que esto pasaría".... Cuando la variable es inesperada, se nos cae el mundo encima, es el destino, Dios o cualquier motivo "sobrehumano" al que podamos "echar la culpa/agradecer".

"Él se lo ha buscado". Siempre ando buscando. Confío poco en el destino, el azar, el sino... es por ello que mi búsqueda solo terminará cuando me duelan los huesos de tanto buscar. En esta etapa de mi vida, me he convertido en un auténtico trovador. He "trovado" algo. Algo que abandoné hace tiempo. Las circunstancias no eran propicias en aquel entonces. No sé si ahora lo son. Lo que sí sé es que esta vez, lo intento. Creo con toda mi alma. Creo con todas mis fuerzas. Creo, creo y creo. Ignoro cómo acabará todo. ¡Ni si quiera sé si empezaré algo! Eso sí: esta vez no pondré obstáculo alguno. No valen excusas. No valen distracciones. No valen dilaciones. Me entrego. Me doy. Tengo el alma limpia, la mente serena y el cuerpo tenso. Estoy preparado para la cabriola de mi vida. No hay red. Lo más seguro es que me estampe en el suelo del circo de la vida. Solo espero que unos brazos me agarren fuertemente.